CONSEJO DE ALIENTO
BILLY GRAHAM
Un resumen de su escrito respecto a cómo salir de sus
preocupaciones; en uno de sus “mensajes de vida”. Billy Graham fue un gran evangelista, estadounidense, un hombre de Dios, así que, sus pensamientos al respecto pueden aportar luz al alma demasiado preocupada por una vida de valores equivocados.
LA ANSIEDAD
Los historiadores probablemente llamarán a esta época en que
vivimos: “La Edad de la Ansiedad”. No obstante, es un hecho el que en las
generaciones anteriores también había mucha congoja. Aunque la vida es más
cómoda que la de nuestros antepasados, sentimos más incomodidad. Aunque tenemos
menos razones reales para llenarnos de ansiedad, en nuestro interior abrigamos
más ansiedad que nuestros antecesores.
Un enorme número de personas de hecho creen que, si se le da
al hombre alimentación, albergue, ropa, facilidades para la educación y para
recreación, entonces se alcanzará a tener una felicidad. Muchos de nuestros
estadistas, mucha de nuestra literatura y casi toda nuestra propaganda
comercial apoyan este totalmente falso punto de vista. Un pensamiento que se
preocupa más bien por el bienestar en el camino de la vida que por el destino
final, esto es una utopía.
La ansiedad moderna no está dirigida hacia los valores reales,
válidos y justificados temores tales como la eternidad, la muerte y el juicio
de Dios, ya que, para ellos, son cosas fuera de la realidad, y son anticuadas
en nuestra moderna sociedad. En esta perspectiva el hombre moderno a querido
llenar el vacío de su alma con toda clase de artificios, pero estos han probado
ser insuficientes para satisfacer sus deseo y anhelos más profundos. Como Adán
y Eva, hemos procurado cubrir nuestra desnudez con las hojas de la higuera,
pero encontramos que las cosas materiales no proveen ninguna protección para el
alma desnuda y estéril.
Fija tus ojos en Cristo y adóralo a Él. Esto da a la vida su
equilibrio, su seguridad y su paz. No me entiendan mal, la ansiedad en sí
misma, en algunos casos, no es cosa mala. Claro que es natural y normal. Jesús,
en el Sermón del Monte, nos amonesta, no en contra de la ansiedad, sino en
contra de la clase de ansiedad que no tiene razón de ser (Mateo 6:25-33) Jesús
dijo: “Venid a mí, y yo os haré descansar”, aquí está la clave. De nada sirve
decirle a la gente que no se preocupe cuando tiene causas justas para
preocuparse. La verdad es que millones de personas tienen razón para
preocuparse porque su vida está muy enmarañada por el egoísmo y torcida por el
pecado.
La Biblia nos indica que la vida cristiana es una vida de
conflicto y lucha. Hay muchas personas que ofrecen una falsa paz mental y
prometen que la fe en Dios hará desaparecer todos los problemas y dificultades.
Esto no es verdad. Dios nunca ha prometido quitarnos nuestras molestias,
problemas y dificultades. Dios ha prometido nuevos recursos y nuevas fuerzas al
cristiano.
La ansiedad existe cuando nuestras necesidades básicas no han
sido suplidas. Pero Jesús dijo: “No os afanéis, buscad primeramente el reino de
Dios, y todas estas cosas os serán añadidas”. La Biblia dice: “Echando toda
vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros” (1Pedro 5:7) El
alma del hombre no puede encontrar satisfacción fuera de Dios. David demostró
el ansia de todos los hombres cuando dijo: “Como el ciervo brama por las
corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía”. El hijo
pródigo, que tuvo que aprender las lecciones de la vida por medio de
experiencias penosas dijo: “¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen
abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!”.
Comentarios
Publicar un comentario