PAZ REAL
Juan Bta. García Serna
PAZ, SEGÚN
LA BIBLIA
El tema de la PAZ es un vocablo que está en los labios de
muchas personas, es una cuestión sociopolítica & universal, además, de ser
algo personalizado. Hay una enseñanza bíblica al respecto que es ignorada por
muchos. Así que, intentaré expresar lo
que dice la Sagrada Escritura al respecto.
¿QUÉ DICE LA BIBLIA?
LA PAZ PROVIENE DE DIOS
“Por nada estéis afanosos,
sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y
ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo
entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo
Jesús” (Fil.4:6-7)
Según este texto bíblico, la paz es el antídoto a todo tipo
de afán: “por nada estéis afanosos”; y la actitud preliminar a obtener esa paz
es, “sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y
ruego, con acción de gracias”. ¿Y cuál
será el resultado? “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento,
guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”. Lo que
Dios ofrece no es una escasez de paz, sino aquella que “sobrepasa todo
entendimiento”. ¿Y dónde se ubica esa paz? “guardará vuestros corazones”, dará
quietud interior al corazón abatido por las muchas preocupaciones que
sobrevienen al ser humano. Ahora Dios también encamina esa paz a nuestros
pensamientos hacia Jesucristo, “y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”. Esta
paz es exclusivamente para el que cree en Jesús como su Salvador personal.
LA PAZ PROVIENE DE JESÚS
“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo
la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo” (Jn. 14:27) Una lectura de este texto bíblico nos sugiere varias cosas de
interés a considerar: a) Jesús ofrece la paz “la paz os dejo” b) esa paz es la
suya misma “mi paz os doy” c) la paz que Jesús ofrece no es comparable a la que
uno recibe del mundo “yo no os la doy como el mundo la da” d) se trata de una
paz que da quietud interior “no se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”. ¿Quién
no desea tener este tipo de paz? ¡Creo que todos la necesitamos! No obstante,
la equivocación está en no saber con certeza dónde encontrarla. Hay en cada
persona un vacío, lo reconozca o no, de poseer esa paz, y por ello, se busca
esa paz en múltiples lugares, pero el resultado es el mismo, ya que las
circunstancias son pasajeras, y no proveen de esta auténtica paz.
LA PAZ PROVIENE DEL
ESPÍRITU SANTO
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo paz, paciencia,
benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza” (GáL.5:22)
Observemos que la paz es uno de los frutos del Espíritu Santo “mas el fruto del
Espíritu es paz”. La PAZ no es generada por la persona, sino que le viene de
Dios el Padre, de Dios el Hijo, y de Dios el Espíritu Santo. ¡Querer
encontrarla en otro lugar es una auténtica equivocación, un error mayúsculo! ¿Qué
dijo el profeta Isaías? “Tú (Dios) guardarás en completa paz a aquel cuyo
pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado” (Isaías 26:3)
¿Tiene Paz el pecador que no tiene en cuenta a Dios? “No hay
paz para los malos, dijo Jehová” (Is.48:22) “No hay paz, dijo mi Dios, para los
impíos” (Is.57:21) En cambio: “Mucha paz tienen los que aman tu Ley” (Salmo
119:165) Tanto el gozo como la paz tienen en cuenta el creer en Dios: “Y el
Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en
esperanza por el poder del Espíritu Santo” (Romanos 15:13); estos textos
bíblicos son de mucho calado espiritual para obtener esa paz de Dios!
LA PAZ PROVIENE DE
TENER PENSAMIENTOS
POSITIVOS
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto,
todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si
hay virtud alguna, si algo de digno de alabanza, en esto pensad. Y el Dios de
paz estará con vosotros” (Fil. 4:8 y 9) ¡Una actitud negativista no trae la paz
interior!
A LA PAZ INTERIOR PRECEDE UNA
RECONCILIACIÓN CON
DIOS
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por
medio de nuestro Señor Jesucristo” (Ro.5:1) Antes de poseer esa paz de Dios en
nuestro corazón, es imprescindible haberse uno reconciliado con Dios por medio
Cristo Jesús. Y sí así no fuese, entonces no habría esa paz real que señala la
Biblia.
LA PAZ CON DIOS
PRFOMUEBE LA
PACIFICACIÓN
“Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán
llamados hijos de Dios” (Mt.5:9) ¿Dónde están los pacificadores en el conflicto
entre marido y mujer? ¿Entre padres e hijos/as? ¿Entre familiares? ¿Entre los
pueblos? ¿Entre las naciones? ¡Hace falta hombres y mujeres que ejerzan la
pacificación y no la guerra! “Si es posible, en cuanto dependa de vosotros,
estad en paz con todos los hombres” (ro.12:18) ¿Haces todo lo posible por
mantener la paz con todas las personas? ¿Eres parte activa de que no haya paz?
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