ENSEÑANZA BÍBLICA DE ORAR
Juan Bta. García Serna
LA ORACIÓN
La oración es definida por el texto bíblico, en el Salmo 42, como un “clamor del alma” (v.1), que conlleva el tener “sed de Dios” (v.2). La oración es un "gemigo indecible del Espíritu" (Ro.8:26), el cual "El intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios" (Ro, 8:27). Jeremías, el profeta, indica que el resultado de clamar a Dios traé el "entender cosas grandes y ocultas que tú no conoces" (Jer.33:3)
ORACIONES EQUIVOCADAS
1ª. Aquellas que no son sinceras: “y, cuando ores, no
seas como los hipócritas, porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y
en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres” (Mt.6:5) Esta
es una clase de oración marcadamente equivocada, no porque halla sido hecha en
público, sino porque es un tipo de oración con apariencia de vida espiritual.
2ª. Aquellas que pretenden una autojustificación ante Dios:
“dos hombres subieron al templo a orar, uno era fariseo, y el otro publicano”
(Lc.18:9-14), pero, quien fue justificado ante Dios, no fue el fariseo, sino
el publicano ¿por qué? porque, mientras uno se auto se justificaba a sí mismo,
el otro confesaba que era pecador y pedía a Dios perdón.
3ª. Aquellas que buscan beneficio propio: “pedís y no
recibís nada porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites” (Stg.4:3)
¡Queda claro que una motivación equivocada en la oración no será
respondida! ¿Hay oración no sincera?
¿Hay oración de autojustificación? ¿hay oración en la que nos interesa es pedir
para gastar en deleites?
ORACIONES CON ESTORBO
1ª. Cuando no hay perdón: “y, cuando estéis orando,
perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está
en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas” (Mt.11:25) No cabe
duda que, si no hay una actitud de perdón, tampoco lo recibiremos de parte de
Dios (v.26)
2ª. Actitud de los cónyuges: “para que vuestras
oraciones no tengan estorbo” (1ª Pedro 3:7) Cuando hay desavenencias en el
matrimonio, ello repercute en la vida de oración. Y esto, también se puede
aplicar en el área de las relaciones con los hijos, y en cualquiera de las
relaciones interpersonales.
3ª. Ausencia de fe en la oración: “pero pida con fe,
no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es
arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien
tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor” (Stg.1:6 y 7) “Por tanto, os
digo que todo lo que pidáis orando, creed que lo recibiréis y os vendrá” (Mt.11:24)
1ª. Cuando la oración responde a la voluntad de Dios:
“Y esta es la confianza que tenemos en Él, qué si pedimos alguna cosa conforme
a su voluntad, Él nos oye” (1ª Jn 5:14) Lo que plantea este texto bíblico es,
la voluntad de Dios, y no que se lleve a cabo la nuestra.
2ª. Cuando vivimos en la enseñanza bíblica: “y
cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de Él, porque guardamos sus mandamientos
y hacemos las cosas que son agradables delante de Él” (1ªJn.3:22) Una
enseñanza que tiene en cuenta la doctrina y la práctica.
3ª. Cuando se persevera en la oración: “¿Y acaso Dios
no hará justicia a sus escogidos que claman a Él día y noche? ¿Se tardará en
responderles?” (Lc.18:7) La parábola de Jesús es en cuanto a la insistencia
en la oración: “sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar” (Lc.18:1)
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