BAUTISMO CRISTIANO
UNA REFLEXIÓN BÍBLICA
Juan Bta. García Serna
INTRODUCCIÓN
La única autoridad en esta cuestión teológica, como en
cualquier otra, indiscutiblemente, debe uno consultar las Sagradas Escrituras,
y sin prejuicios preconcebidos, acatar su clara enseñas, sea ésta la que la
Biblia exprese. ¿Por qué? “Y que desde la niñez has sabido las Sagradas
Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es
en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar,
para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el
hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”
(2Tm.3:15-17). Jesús dijo: “Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os
parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio
de mí” (Jn.5:39) San Agustín: “Cuanto es más pobre el hombre de su propio
fondo, más debe enriquecerse en las fuentes sagradas. Para todas las
enfermedades del alma proporciona la Sagrada Escritura un remedio. Ama las
Sagradas Escrituras y te amará la Sabiduría”. ¡Sabio consejo!
San Jerónimo: “Ignorar las Escrituras es ignorar al mismo
Cristo. No hay más que un río que mana del trono de Dios, y en la gracia del
Espíritu Santo, y esta gracia del Espíritu Santo está encerrada en las Sagradas
Escrituras, es decir, en ese río de las Escrituras. Y corre este río entre dos
riberas que son el Antiguo y el Nuevo Testamento, y en cada orilla se encuentra
plantado un árbol, que es Cristo”. Inocencio
III, Papa “Acudamos a la Sagrada Escritura cada vez que tengamos que luchar con
graves tentaciones; en ella encontramos cosas que nos causan maravilla, y
ejemplos que imitar”. “Recordad que es una misma Palabra de Dios la que se
extiende en todas las escrituras, que es un mismo Verbo que resuena en la boca
de todos los escritores sagrados, el que, siendo al comienzo Dios junto a Dios,
no necesita sílabas porque no está sometido al tiempo” (S. Agustín,
Psal.103,4,1). (Catecismo de la Iglesia Católica. Pág.34)
El tema en cuestión requiere una respuesta a tres preguntas que considero de relevancia. Y dejó al lector en su propia reflexión, después de haber considerado lo que dice la Biblia, ya que no se trata de una determinada confesión religiosa sea de la índole teológica que sea, sino de la propia palabra de Dios: “Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios” (1Ped.4:11) Me pregunto ¿por qué añadir, o decir, lo que la Biblia no dice, y en muchos casos ir en contra de la misma palabra de Dios, cuya inspiración es indiscutible? ¿Por qué ser arrastrados por tradiciones de los hombres al igual que los religiosos judíos en el tiempo de Cristo Jesús, que aferrándose a las tradiciones de los hombres dejaban lo que estaba escrito en el Antiguo Testamento? ¡Deja a un lado tus argumentos de una mala exégesis teológica, y apóyate en la Biblia! ¿Crees que estarás haciendo bien si anulas las enseñanzas bíblicas en aras de una enseñanza religiosa que contradice las Sagradas Escrituras?
¿CUÁNDO EL BAUTISMO?
En primer lugar, Jesús nos dio ejemplo de su propio bautismo
por Juan al Bautista, cuando era una persona adulta, y no se hizo cuando era un
bebé ¿por qué? En segundo lugar, Jesús dice el cuándo uno debe bautizarse. Según Jesús la fe precede al bautismo:
“El que creyere y fuere bautizado, será salvo, mas el que no creyere, será
condenado” (Mr.16:16). Según enseñanza apostólica antes del bautismo es
necesario recibir la palabra de Dios: “Así que, los que recibieron su
palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas”
(Hch.2:41). Felipe y el eunuco, éste fue bautizado una vez creyó en
Jesucristo: “Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta
escritura (Is.53:7-8), le anunció el evangelio de Jesús. Y yendo por el camino,
llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aquí hay agua:¿Qué impide que yo sea
bautizado? Felipe le dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes. Y
respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. Y mandó parar el
carro; y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó”
(Hch.8:35-38). “Y muchos de los corintios, oyendo, creían y eran bautizados”
(Hch.18:8)
¿COMO BAUTIZARSE?
Tal vocablo al derivarse del griego indica a la acción de
lavar o sumergirse en agua, lo que ha sido usado desde los primeros días de la
era Apostólica, cuyos descubrimientos arqueológicos lo evidencian. En el
bautismo de Jesús, por Juan el Bautista, hay una expresión significativa: “y
Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua” (Mt.3:16). No
hay tal cosa, en las Escrituras, como aspersión bautismal, sino una inmersión,
o sumergirse en el agua. Así consta en su significado más profundo, expresado
por el Apóstol Pablo, al referirse al creyente: “¿O no sabéis que todos los que
hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte?
Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a
fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así
también nosotros andemos en vida nueva” (Ro.6:3-4)
¿POR QUÉ BAUTIZARSE?
Según los textos bíblicos citados era la práctica de la
iglesia primitiva, a diferencia del ritual practicado por el pueblo judío
respecto a la circuncisión judaica. En el Nuevo Testamento solamente
observamos en los cristianos primitivos dos ordenanzas: bautismo y santa cena.
Y estas dos órdenes neotestamentarias eran símbolos de un cambio de vida Es verdad que confesiones religiosas
posteriores han añadido otras enseñanzas a las Escrituras, que son extra
bíblicas, pero yo prefiero atenerme en exclusiva a la Biblia, como la única
palabra de Dios infalible. Jesús fue bastante crítico con los religiosos
del judaísmo: “Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra
tradición” (Mt.15:6). Y el Apóstol Pablo avisa a los cristianos: “Mirad que
nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilizas, según las
tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según
Cristo” (Col.2:8). Uno debería preguntarse si permanece en la doctrina de los
apóstoles, como hacían los primeros cristianos: “Así que los que recibieron su
palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. Y
perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en
el partimiento del pan y en las oraciones” (Hch.2:41- 42). El bautismo tal como
he citado es una doctrina de la época apostólica y escritural, y si uno tomare
otro camino, en el tal no hay seguridad de estar haciendo lo que Dios ha
mandado.
¿SALVA EL BAUTISMO?
Obviamente, no hay apoyo neotestamentario de que el bautismo
sea un medio de salvación. Y cambio, lo que si se enfatiza es la salvación por
medio del arrepentimiento y la fe en Cristo Jesús. Cito unos cuantos textos
bíblicos como apoyo escritural al respecto: Pablo, el apóstol, dijo: “Porque
por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don
de Dios” (Ef.2:8) Jesús dijo: “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi
palabra, y cree al que me envío, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación,
mas ha pasado de muerte a vida” (Jn.3:24) Ante la pregunta del carcelero de
Filipos: “¿Qué debo hacer para ser salvo?” el apóstol Pablo le dijo: “Cree en
el Señor Jesucristo, y serás salvo”
(Hch.16:30 y 31) Jesús dijo: Arrepentíos, y creed en el evangelio” (Mr.1:15) “Y
saliendo (los primeros discípulos de Jesús) predicaban que los hombres se
arrepintiesen” (Mr.6:12) El mensaje apostólico era: “”Así que, arrepentíos y
convertíos, para que sean borrados vuestros pecados” (Hch.3:19) En el evangelio
según Juan leemos: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su
Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga
vida eterna” (Jn.3:16) “Y este es el
testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El
que tiene al Hijo, tiene la vida; el que
no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida” (1Jn.5:11 y 12) “Dios, ahora
manda a todos los hombres en todo lugar , que se arrepientan” (Hch.17:30)
Pedro, el apóstol dijo: “De éste dan testimonio todos los profetas, que todos
los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre” (Hch.10:43)
Síii me gusta mucho tu blog , con tu sabíduria .es la mejor noticia de la historia la Santa Biblia , pues solo JESÚS ,es el que ha librado mi alma de la muerte, cuanto bien hace su palabra , , Juan si yo les digo a mis contactos de ti.
ResponderEliminarPero es más fácil oír a un predicador que leer , es completamente diferentes no es mejor ni peor , es más fácil porque oyes y estás haciendo por ejemplo la comida . , Yo Juan te hago publicidad. y seguro que alguna ya lo han leído , pero si no comentan .
Pero seguro que si que te leen. Gracias Juan Bautista , que DIOS te use y te bendiga...
Dos abrazos.